martes, 8 de marzo de 2011

Un 8 de Marzo...




Algunas dicen que fue un domingo... tal vez al medio día, tal vez en la tarde..., eran minutos de principios de siglo... que como siempre fijan el rumbo porque eran de esos que cuentan.

Otros dicen, que fue en esa fábrica en Nueva York, o en esa plantación en Honduras, o en una plaza en Managua quizá en las calles de Beirut... La verdad siempre ha sido en todos lados... solo que sólo recordamos algunos.

Muchas afirman que eran esas voces que no por primera vez se alzaban... No! No era la primera vez..., ya habían abierto la boca.... Y les habían puesto nombre: brujas, herejes, blasfemas, impuras…

Todos y todas concordaron en que fueron esos ojos, esas miradas fijas de quienes al haber dado esos pasos, se niegan a retroceder..., y se enfrentan a la opresión y al dominio con la dignidad de quienes asumen su valor, su valentía y su temple.

Porque eran ellas, las que cuidaban, las que asumían, las que trabajaban, alimentaban, soñaban y amaban...; las que querían votar, las que querían ganarse un pan digno, las que querían estudiar, las que querían ser escuchadas, tomadas en cuenta..., valoradas...; eran madres, hermanas, hijas, abuelas, y lo siguen siendo…

Porque son las trabajadoras, las campesinas, las costureras, las cocineras, las amas de casa, las cuidadoras, las barrenderas, las de aquí, las de allá, las de los parques, son las jóvenes, las no tan jóvenes, son las primas, las novias, las amigas, también las magas!..., y las admirables! Y en ellas... éramos nosotras... nosotros..., todas y todos en sus vientres, mentes y corazones…

Eran, son y lo seguirán siendo... con sus voces, con sus marchas, con sus labores, con sus sonrisas, con sus demandas, con sus manos que cultivan sueños, con sus triunfos, con sus luchas logradas, también las perdidas, y las pendientes... MUJERES.

Porque un 8 de Marzo no es un recordatorio de que valemos..., es un recordatorio, una conmemoración y una celebración de los pasos que otras y otros -porque los ha habido- dieron. Pasos a los que unimos los nuestros. Pasos que nos han ofrecido libertad... y que se han juntado a otras luchas más amplias y hermosas..., revoluciones, reivindicaciones, transformaciones... EMANCIPACIONES… Luchas que hoy nos tejen el futuro con oportunidades y desafíos aún por cumplir.

Porque un 8 de Marzo es tal vez una excusa para mirar atrás, inspirarnos y agradecer..., y para agarrar impulso, porque nos quedan todavía muchas luchas pendientes...

Que el día de hoy les derrame el compromiso, el amor y la magia que un vientre de mujer les regaló, un día de tantos al nacer...


Felicidades cada día, pues cada día es vuestro…

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