Zaragoza. Comité de Solidaridad Internacionalista de Zaragoza.
El Comité de Solidaridad Internacionalista enviará una delegación de cinco miembros en defensa del proceso electoral del 6 de noviembre en Nicaragua, anuncia el grupo en un pronunciamiento.
Los activistas de la solidaridad viajarán al país "no como observadores; nada tenemos que observar, porque estamos convencidos de que con un gobierno del FSLN la limpieza del proceso electoral está asegurada al cien por cien", escribe el grupo en la nota, y recuerda que ya en las elecciones de 1984 y de 1990 el Frente Sandinista en el gobierno llevó adelante "las elecciones más limpias y transparentes de la historia de Nicaragua".
Para los activistas, "Ningún gobierno occidental puede dar clases de democracia y de 'estado de derecho'" a los nicaragüenses, que fueron capaces de liberarse de la tiranía somocista.
Contrariamente a lo que sostienen los medios occidentales y la derecha, "la candidatura de Daniel Ortega es democrática, legal y legitima. Como en cualquier estado 'democrático occidental', son los jueces quienes interpretan las leyes. La Corte Suprema de Justicia no ha decidido que Daniel Ortega siga en su cargo eternamente. Se le permite ser candidato, y será el pueblo quien decida con su voto si lo mantiene o no."
Los miembros del comité de solidaridad afirman que "El estado de Nicaragua no tiene ninguna obligación de aceptar la participación de observadores internacionales" siendo que "en los procesos electorales de EEUU, España o cualquier país europeo" tampoco son invitados observadores.
En vez de viajar al país a observar los comicios, la delegación lo hace "para solidarizarnos con el pueblo de Nicaragua por todos los logros sociales y políticos alcanzados durante estos cinco años de gobierno Sandinista".
Según el grupo, mientras "las políticas neoliberales que aplicaron los sucesivos gobiernos derechistas, en complicidad con organismos internacionales y gobiernos occidentales, llevaron a Nicaragua a una situación de caos social con más de 1.500.000 hambrientos (...) cinco años después de que Daniel (Ortega) asumiera el gobierno, ese panorama ha cambiado en lo fundamental".
Finalmente, afirman que "que una victoria electoral del Sandinismo profundizará los cambios sociales que necesita Nicaragua; ese proyecto de Revolución Sandinista por el que lucharon y murieron miles de nicaragüenses".
A continuación, el pronunciamiento íntegro del Comité Internacionalista de Zaragoza.
Pronunciamiento en Defensa del Proceso Electoral en Nicaragua
Comité de Solidaridad Internacionalista de Zaragoza
«¿De qué libertad nos hablan estos heraldos de la burguesía? ¿Acaso de esa libertad que nos atribuyen idealmente a cada uno de nosotros, y que la experiencia concreta de cada día niega en el hambre de los niños, en el salario de los trabajadores, en la incultura, el desempleo y el analfabetismo, en la opresión de la clase burguesa? La libertad de que hablamos nosotros es ésa que tenemos, que ganamos en las barricadas, que nos liberará del yugo de la explotación de clase de la burguesía. Libertad socialista es de lo que hablamos.
Ricardo Morales Avilés
El próximo 6 de noviembre se celebran elecciones presidenciales y legislativas en Nicaragua.
Como ha ocurrido desde el 11 de enero de 2007, cuando Daniel Ortega asumiera la Presidencia del Gobierno, desde medios de comunicación tanto occidentales como nicaragüenses y desde ONG´s y algunas organizaciones políticas que se autoproclaman representantes de la "sociedad civil", aunque solamente representen a un puñado de burócratas que llevan muchos años viviendo a costillas de los fondos destinados al pueblo, se ha orquestado una campaña de manipulación, difamación y mentiras contra el gobierno sandinista y el proceso electoral nicaragüense.
Ante esta criminal campaña, que busca principalmente desestabilizar el país, deslegitimar estas elecciones (todas las encuestas dan la victoria a Daniel Ortega con más del 50% de los votos) y crear un clima de miedo y violencia, desde el Comité de Solidaridad Internacionalista de Zaragoza (Estado español), declaramos lo siguiente:
1. Desde el 19 de Julio de 1979, cuando los nicaragüenses acabaron con más de 40 años de dictadura somocista, Nicaragua es un país libre, donde las libertades individuales, de prensa o de expresión han sido respetadas. Ningún gobierno occidental puede dar clases de democracia y de "estado de derecho" a Nicaragua.
2. Manifestamos nuestro respaldo incondicional al derecho del pueblo nicaragüense a su autodeterminación y soberanía nacional, sin injerencias extranjeras de ningún tipo.
3. La candidatura de Daniel Ortega es democrática, legal y legitima. Como en cualquier estado "democrático occidental", son los jueces quienes interpretan las leyes. La Corte Suprema de Justicia no ha decidido que Daniel Ortega siga en su cargo eternamente. Se le permite ser candidato, y será el pueblo quien decida con su voto si lo mantiene o no. Lo mismo que ocurría en la Constitución de 1987, la constitución original de la Revolución Popular Sandinista. Aquella Constitución se redactó después de consultarse en miles de cabildos abiertos con todo el pueblo de Nicaragua. Esa Constitución, ejemplo de democracia y participación ciudadana, contemplaba la reelección indefinida para todos los cargos. Y esa Constitución fue reformada por intereses personales de cúpulas partidarias en 1995, por diputados "renovadores" y de la UNO que jamás consultaron al pueblo. Meses después, en las elecciones de 1996, esos diputados que habían reformado la constitución sin consultarlo con nadie, no llegaron ni al 4 % de representación en la Asamblea Nacional. ¿De verdad alguien se puede creer que esa reforma se produjo bajo condiciones democráticas? En Nicaragua se ha producido la restitución de un derecho, elegir a quien te dé la gana.
4. El estado de Nicaragua no tiene ninguna obligación de aceptar la participación de observadores internacionales en sus elecciones para demostrar su limpieza democrática. ¿Acaso son invitados a participar como observadoras las instituciones nicaragüenses en los procesos electorales de EEUU, España o cualquier país europeo? Aún así, el consejo Supremo Electoral ha invitado a todas las instituciones internacionales que lo deseen a poder "acompañar" a los nicaragüenses en este proceso electoral; de hecho, varias instituciones internacionales, como la OEA y la Comunidad Europea, lo van a hacer.
5. Desde el Comité de Solidaridad Internacionalista, cinco compañeros van a acudir a estas elecciones, pero no como observadores; nada tenemos que observar, porque estamos convencidos de que con un gobierno del FSLN la limpieza del proceso electoral está asegurada al cien por cien; al igual que lo estuvo en el 84 y en el 90, cuando el Sandinismo estaba en el gobierno y se realizaron las elecciones más limpias y transparentes de la historia de Nicaragua. Estamos seguros de que ahora será igual.
6. Nuestra participación en estas elecciones es para solidarizarnos con el pueblo de Nicaragua por todos los logros sociales y políticos alcanzados durante estos cinco años de gobierno Sandinista.
7. Del 90 al 2006, las políticas neoliberales que aplicaron los sucesivos gobiernos derechistas, en complicidad con organismos internacionales y gobiernos occidentales, llevaron a Nicaragua a una situación de caos social con más de 1.500.000 hambrientos. Un país en manos de multinacionales, de organismos económicos internaciones, de especuladores financieros, sin ninguna estrategia de desarrollo nacional. La educación y la salud pasó a ser un derecho solamente de los privilegiados y de quien se lo pudiera costear. El crédito se convirtió en un arma criminal para despojar a la gente más humilde de sus propiedades. Se privatizó el país; desde sectores estratégicos como la energía hasta empresas estatales que funcionaban y que generaban ingresos a las arcas del estado. Cinco años después de que Daniel asumiera el gobierno, ese panorama ha cambiado en lo fundamental. Hoy la educación y la salud son un derecho humano de todo el pueblo. Nicaragua tiene un plan de desarrollo como nación cuyo eje fundamental es mejorar la vida de la gente y, principalmente, de los que estaban condenados a la marginalidad. Están en marcha proyectos energéticos para dar estabilidad económica al país. El crédito se convirtió en un derecho de toda la ciudadanía: desde campesinos, productores, trabajadores por cuenta propia o consumidores. La cultura, el deporte y el recreo ya no es sólo un derecho de quien se lo pueda pagar. Nicaragua es autosuficiente en la mayoría de los productos básicos de consumo alimentario. Posible gracias a los productores grandes, medianos y pequeños, a las cooperativas, y gracias al apoyo crediticio que se les ha venido otorgando.
8. Desde el Comité de Solidaridad Internacionalista respaldamos el proceso electoral nicaragüense y manifestamos nuestro rechazo a todo ese grupo de resentidos que, ante la frustración que les produce el avance electoral del FSLN, están haciendo llamados a la violencia y a deslegitimar el posible triunfo del Frente Sandinista el próximo 6 de Noviembre. Estamos seguros de que una victoria electoral del Sandinismo profundizará los cambios sociales que necesita Nicaragua; ese proyecto de Revolución Sandinista por el que lucharon y murieron miles de nicaragüenses.
Sandino vive, ¡la lucha sigue!
Zaragoza, 27 de Octubre de 2011
Comité de Solidaridad Internacionalista de Zaragoza
Los activistas de la solidaridad viajarán al país "no como observadores; nada tenemos que observar, porque estamos convencidos de que con un gobierno del FSLN la limpieza del proceso electoral está asegurada al cien por cien", escribe el grupo en la nota, y recuerda que ya en las elecciones de 1984 y de 1990 el Frente Sandinista en el gobierno llevó adelante "las elecciones más limpias y transparentes de la historia de Nicaragua".
Para los activistas, "Ningún gobierno occidental puede dar clases de democracia y de 'estado de derecho'" a los nicaragüenses, que fueron capaces de liberarse de la tiranía somocista.
Contrariamente a lo que sostienen los medios occidentales y la derecha, "la candidatura de Daniel Ortega es democrática, legal y legitima. Como en cualquier estado 'democrático occidental', son los jueces quienes interpretan las leyes. La Corte Suprema de Justicia no ha decidido que Daniel Ortega siga en su cargo eternamente. Se le permite ser candidato, y será el pueblo quien decida con su voto si lo mantiene o no."
Los miembros del comité de solidaridad afirman que "El estado de Nicaragua no tiene ninguna obligación de aceptar la participación de observadores internacionales" siendo que "en los procesos electorales de EEUU, España o cualquier país europeo" tampoco son invitados observadores.
En vez de viajar al país a observar los comicios, la delegación lo hace "para solidarizarnos con el pueblo de Nicaragua por todos los logros sociales y políticos alcanzados durante estos cinco años de gobierno Sandinista".
Según el grupo, mientras "las políticas neoliberales que aplicaron los sucesivos gobiernos derechistas, en complicidad con organismos internacionales y gobiernos occidentales, llevaron a Nicaragua a una situación de caos social con más de 1.500.000 hambrientos (...) cinco años después de que Daniel (Ortega) asumiera el gobierno, ese panorama ha cambiado en lo fundamental".
Finalmente, afirman que "que una victoria electoral del Sandinismo profundizará los cambios sociales que necesita Nicaragua; ese proyecto de Revolución Sandinista por el que lucharon y murieron miles de nicaragüenses".
A continuación, el pronunciamiento íntegro del Comité Internacionalista de Zaragoza.
Pronunciamiento en Defensa del Proceso Electoral en Nicaragua
Comité de Solidaridad Internacionalista de Zaragoza
«¿De qué libertad nos hablan estos heraldos de la burguesía? ¿Acaso de esa libertad que nos atribuyen idealmente a cada uno de nosotros, y que la experiencia concreta de cada día niega en el hambre de los niños, en el salario de los trabajadores, en la incultura, el desempleo y el analfabetismo, en la opresión de la clase burguesa? La libertad de que hablamos nosotros es ésa que tenemos, que ganamos en las barricadas, que nos liberará del yugo de la explotación de clase de la burguesía. Libertad socialista es de lo que hablamos.
Ricardo Morales Avilés
El próximo 6 de noviembre se celebran elecciones presidenciales y legislativas en Nicaragua.
Como ha ocurrido desde el 11 de enero de 2007, cuando Daniel Ortega asumiera la Presidencia del Gobierno, desde medios de comunicación tanto occidentales como nicaragüenses y desde ONG´s y algunas organizaciones políticas que se autoproclaman representantes de la "sociedad civil", aunque solamente representen a un puñado de burócratas que llevan muchos años viviendo a costillas de los fondos destinados al pueblo, se ha orquestado una campaña de manipulación, difamación y mentiras contra el gobierno sandinista y el proceso electoral nicaragüense.
Ante esta criminal campaña, que busca principalmente desestabilizar el país, deslegitimar estas elecciones (todas las encuestas dan la victoria a Daniel Ortega con más del 50% de los votos) y crear un clima de miedo y violencia, desde el Comité de Solidaridad Internacionalista de Zaragoza (Estado español), declaramos lo siguiente:
1. Desde el 19 de Julio de 1979, cuando los nicaragüenses acabaron con más de 40 años de dictadura somocista, Nicaragua es un país libre, donde las libertades individuales, de prensa o de expresión han sido respetadas. Ningún gobierno occidental puede dar clases de democracia y de "estado de derecho" a Nicaragua.
2. Manifestamos nuestro respaldo incondicional al derecho del pueblo nicaragüense a su autodeterminación y soberanía nacional, sin injerencias extranjeras de ningún tipo.
3. La candidatura de Daniel Ortega es democrática, legal y legitima. Como en cualquier estado "democrático occidental", son los jueces quienes interpretan las leyes. La Corte Suprema de Justicia no ha decidido que Daniel Ortega siga en su cargo eternamente. Se le permite ser candidato, y será el pueblo quien decida con su voto si lo mantiene o no. Lo mismo que ocurría en la Constitución de 1987, la constitución original de la Revolución Popular Sandinista. Aquella Constitución se redactó después de consultarse en miles de cabildos abiertos con todo el pueblo de Nicaragua. Esa Constitución, ejemplo de democracia y participación ciudadana, contemplaba la reelección indefinida para todos los cargos. Y esa Constitución fue reformada por intereses personales de cúpulas partidarias en 1995, por diputados "renovadores" y de la UNO que jamás consultaron al pueblo. Meses después, en las elecciones de 1996, esos diputados que habían reformado la constitución sin consultarlo con nadie, no llegaron ni al 4 % de representación en la Asamblea Nacional. ¿De verdad alguien se puede creer que esa reforma se produjo bajo condiciones democráticas? En Nicaragua se ha producido la restitución de un derecho, elegir a quien te dé la gana.
4. El estado de Nicaragua no tiene ninguna obligación de aceptar la participación de observadores internacionales en sus elecciones para demostrar su limpieza democrática. ¿Acaso son invitados a participar como observadoras las instituciones nicaragüenses en los procesos electorales de EEUU, España o cualquier país europeo? Aún así, el consejo Supremo Electoral ha invitado a todas las instituciones internacionales que lo deseen a poder "acompañar" a los nicaragüenses en este proceso electoral; de hecho, varias instituciones internacionales, como la OEA y la Comunidad Europea, lo van a hacer.
5. Desde el Comité de Solidaridad Internacionalista, cinco compañeros van a acudir a estas elecciones, pero no como observadores; nada tenemos que observar, porque estamos convencidos de que con un gobierno del FSLN la limpieza del proceso electoral está asegurada al cien por cien; al igual que lo estuvo en el 84 y en el 90, cuando el Sandinismo estaba en el gobierno y se realizaron las elecciones más limpias y transparentes de la historia de Nicaragua. Estamos seguros de que ahora será igual.
6. Nuestra participación en estas elecciones es para solidarizarnos con el pueblo de Nicaragua por todos los logros sociales y políticos alcanzados durante estos cinco años de gobierno Sandinista.
7. Del 90 al 2006, las políticas neoliberales que aplicaron los sucesivos gobiernos derechistas, en complicidad con organismos internacionales y gobiernos occidentales, llevaron a Nicaragua a una situación de caos social con más de 1.500.000 hambrientos. Un país en manos de multinacionales, de organismos económicos internaciones, de especuladores financieros, sin ninguna estrategia de desarrollo nacional. La educación y la salud pasó a ser un derecho solamente de los privilegiados y de quien se lo pudiera costear. El crédito se convirtió en un arma criminal para despojar a la gente más humilde de sus propiedades. Se privatizó el país; desde sectores estratégicos como la energía hasta empresas estatales que funcionaban y que generaban ingresos a las arcas del estado. Cinco años después de que Daniel asumiera el gobierno, ese panorama ha cambiado en lo fundamental. Hoy la educación y la salud son un derecho humano de todo el pueblo. Nicaragua tiene un plan de desarrollo como nación cuyo eje fundamental es mejorar la vida de la gente y, principalmente, de los que estaban condenados a la marginalidad. Están en marcha proyectos energéticos para dar estabilidad económica al país. El crédito se convirtió en un derecho de toda la ciudadanía: desde campesinos, productores, trabajadores por cuenta propia o consumidores. La cultura, el deporte y el recreo ya no es sólo un derecho de quien se lo pueda pagar. Nicaragua es autosuficiente en la mayoría de los productos básicos de consumo alimentario. Posible gracias a los productores grandes, medianos y pequeños, a las cooperativas, y gracias al apoyo crediticio que se les ha venido otorgando.
8. Desde el Comité de Solidaridad Internacionalista respaldamos el proceso electoral nicaragüense y manifestamos nuestro rechazo a todo ese grupo de resentidos que, ante la frustración que les produce el avance electoral del FSLN, están haciendo llamados a la violencia y a deslegitimar el posible triunfo del Frente Sandinista el próximo 6 de Noviembre. Estamos seguros de que una victoria electoral del Sandinismo profundizará los cambios sociales que necesita Nicaragua; ese proyecto de Revolución Sandinista por el que lucharon y murieron miles de nicaragüenses.
Sandino vive, ¡la lucha sigue!
Zaragoza, 27 de Octubre de 2011
Comité de Solidaridad Internacionalista de Zaragoza