La inmensa mayoría de clase trabajadora de Nicaragua conmemora este Primero de Mayo con mayor dignidad, indicó el Presidente de la República Comandante Daniel Ortega, durante el acto del II Aniversario del Paso a la Inmortalidad del Comandante Tomás Borge y del Día Internacional de los Trabajadores, realizado en la Plaza de la Revolución.
“Mañana Primero de Mayo, tenemos nosotros el orgullo de decir, de afirmar, que la clase trabajadora, los trabajadores de nuestro país, la inmensa mayoría de los trabajadores, desde hoy (miércoles), mañana y los próximos días estarán conmemorando este Primero de Mayo con la dignidad con que han sabido representar al pueblo nicaragüense”, destacó Daniel en este acto, en el que estuvo acompañado por la Coordinadora del Consejo de Comunicación, compañera Rosario Murillo, por los dirigentes del Frente Nacional de los Trabajadores y por la Juventud Nicaragüense.
“El pueblo nicaragüense tiene que sentirse contento, honrado de contar con una clase trabajadora comprometida con el pueblo, comprometida con la justicia, comprometida con la solidaridad, comprometida con el futuro de este pueblo y de este país”, afirmó el comandante Daniel.
Una historia de lucha
Recordó que a esta generación de sindicalistas le tocó combatir contra la Tiranía Somocista desde las filas del Frente Sandinista, y posteriormente con el triunfo de la Revolución organizar los sindicatos de trabajadores de la ciudad y del campo.
Señaló que durante ese tiempo el salario que se devengaba era prácticamente simbólico, justo solamente para cubrir las necesidades básicas, a lo que hay que sumar el heroísmo con que asumieron también la defensa armada de la revolución.
Neoliberales contra los trabajadores
Recordó que a partir del 25 de abril de 1990 el Frente Nacional de los Trabajadores (FNT) fue el principal instrumento de lucha, ya que se vio la necesidad de hacerle frente a las medidas de los gobiernos neoliberales que estabán enviando a la calle a miles de trabajadores.
Dijo que desde esa fecha en adelante hubo una persecución de todos los sindicalistas, lo cual vino acompañado incluso de la destrucción de obras de arte elaboradas por artistas nacionales y extranjeros.
Catalogó esta actitud de los neoliberales como de barbarie.
“Parecía aquello la inquisición en sus mejores tiempos”, refirió.
Daniel afirmó que a pesar que muchos trabajadores fueron despedidos otros continuaron la resistencia dentro de las empresas que eran del pueblo y que los gobiernos de entonces querían arrebatárselas a través de la privatización.
La defensa de los derechos
Señaló que en estos momentos de tensión bien se pudo derrocar pacíficamente a esos gobiernos, pero que el Frente estaba enfocado en luchar por los derechos de los trabajadores, ya que el gobierno de ese entonces había llegado al poder a través de las urnas.
“Podríamos decir que frente a los planes de destrucción de las conquistas de la Revolución que empezaron a desarrollarse, hubiésemos tenido toda la autoridad y la legitimidad para ir a la lucha pacífica en las calles para derrocar al gobierno”, recordó.
Derecha busca desestabilizar
Dijo que al contrario a esos gobiernos que enviaban a la Policía a enfrentarse con el pueblo, el gobierno Sandinista actual nunca ha sacado al Ejército.
“Vean el contraste de cómo hemos actuado nosotros desde el año 2007 hasta la fecha frente a las continuas protestas que se han presentado, porque aquí hay libertad de protestar, y salen a protestar; la tolerancia que ha habido. Ninguna sola vez hemos sacado al Ejército. La Policía más bien ha sido víctima de los que se manifiestan de parte de una oposición alimentada por el imperio y por el somocismo”, señaló Daniel, quien afirmó que muchas veces esos grupos buscan que la Policía les golpeo para volver eso una noticia mundial.
Recordó que en los noventas se hicieron muchas denuncias, pero que estas no tuvieron eco porque “éramos los malos que no dejábamos gobernar”.
Actualmente dijo que la derecha no ha tenido la capacidad de “ganarse el corazón del pueblo para ganar elecciones”, de allí que no les queda más que “en la desesperación gritar que hay que derrocar al Gobierno (Sandinista).
Manifestó que en aquel entonces el Frente solicitó un acuerdo, ya que la derecha quería imponer la demolición por fuerza de las bases de la revolución, teniendo entre sus objetivo eliminar al Ejército y reducir a la Policía Nacional.
Refirió que la derecha en una reunión un delegado gubernamental inclusive llegó a ofrecer la llaves del gobierno al Frente.
“Yo le respondí: nosotros no estamos asumiendo el gobierno en estas condiciones, nuestra lucha no es para asumir el gobierno bajo la presión ni bajo la fuerza, nuestro reto es volver a asumir el gobierno con el voto y el respaldo del pueblo nicaragüense, por lo tanto ustedes quédense con las llaves de la Presidencia y busquen cómo resolver”, afirmó Daniel, quien señaló que al final se firmaron los acuerdos de la concertación entre los trabajadores y el gobierno. Esto permitió mantener algunos espacios y que los trabajadores mantuvieron algunas empresas y propiedades.
Un nuevo modelo
El comandante Daniel recordó que en todas estas batallas estuvo presente precisamente el fundador del Frente Sandinista, Comandante Tomás Borge.
“Hoy en este segundo aniversario de Tomás, con Carlos, con el Coronel Santos López, con Sandino, estamos viviendo una etapa de lo que podríamos llamar un proceso que permita fortalecer, darle una mayor estabilidad, una mayor seguridad al país para que este proceso democrático, profundamente democrático, siga abriéndonos caminos para continuar librando la lucha por el empleo, la lucha por la salud, la lucha por la educación, la lucha en beneficio de las cooperativas, la lucha con todas las fuerzas económicas de nuestro país, fortalecer esa gran alianza que viene caminando y se viene consolidando entre los empresarios, los trabajadores de la ciudad y el campo y el pueblo nicaragüense, todos juntos en esta gran alianza, que es la alianza que nos permite sentar las bases con mayor firmeza”, señaló.
En este punto dijo que el Frente encontró en el 2007 un Estado diseñado en función de los intereses de quienes habían asumido el poder en 1990.
Recordó que ellos hicieron las reformas a la Constitución Política. “Fueron los primeros que dieron el ejemplo de que la Constitución podía ser reformada”, refirió Daniel, quien señaló que el Frente dejó una Constitución en 1987.
Daniel aseguró que los neoliberales tuvieron 17 años para imponer su modelo de acuerdo a sus intereses, donde el pueblo se convierte en un factor secundario.
Dijo que el Gobierno Sandinista tiene apenas 7 años al frente de este nuevo modelo.
“¿Quién les dijo a ellos que se bajaran porque ya tenían 17 años? Ellos querían continuar, y está bien, están en su derecho, al final de cuentas decide el pueblo. Igual nosotros queremos continuar, estamos en nuestro derecho y finalmente decide el pueblo, esa es la realidad”, puntualizó.
Daniel afirmó que este nuevo modelo se ajusta a las circunstancias actuales del mundo, de allí que no era posible reeditar el modelo de los años ochentas, el cual dejó su herencia en valores y principios.
En esta nueva etapa la participación ciudadana es el eje, es el corazón, es el alma de este nuevo modelo, explicó.
Daniel alabó también la participación de la juventud en este modelo.
El mandatario señaló que no importa que le llamen paternalismo al acto de llevar un paquete de alimentos o el plan techo a las familias pobres, ya que lo que le importa al gobierno es ir mejorando las condiciones de quienes todavía están en la extrema pobreza.
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